Este Mundial, desde mi percepción, fue tan real como extraordinario, pareciéndose hasta al mismísimo relato de un libro de autoayuda para confiar en uno mismo y seguir adelante. Seguir pese al qué dirán o harán. Seguir por convicción, con la misma pasión que desde el mero inicio, allí donde comenzó todo.
Yo sé que tal vez no lo creas. Sé que parece hasta un cuento chino. Pero creeme que podés ganar mucho más de lo que pensás (¡y no perdés nada!). A través de este episodio, te cuento de qué manera podés hacer tu "carta de manifestación y gratitud" para lograr cada anhelo y deseo :). Si bien es un episodio pensado para fin de año, la realidad es que vos lo podés hacer en el momento que consideres más conviente, ya sea a fin de año o en pleno Agosto. ¿Estás list@? Amor y mucha paz para vos, hoy y siempre :)
Ya pasaron 6 meses desde esa Luna nueva en Capricornio, esa Luna que sucedió a principios de este año y nos dió el empujón para comenzar a organizarnos, a armar planes y proyectos para todo este año que recién comenzaba para aquella época. ¿Te acordás qué planeaste para aquél entonces? ¿Cuáles eran tus anhelos, tus deseos, tus aspiraciones y objetivos? Seis meses después, con el de todo mismo pasando por delante de nuestros ojos, acá estamos. ¿En dónde estás? ¿Qué de todo eso que planeaste para principios de año se cumplió? ¿Qué está en desarrollo? ¿Qué pasó en todo este tiempo que, desde mi parecer, es como que voló de tan rápido que pasó?
Esta Luna nueva es nuestra gran oportunidad de salir del cascarón y abrirnos hacia el mundo exterior, literalmente. Nos llena de energía e impulso para abrirnos hacia lo que no conocemos para ir más allá de nuestros miedos. Nos da la oportunidad de salir de esa zona de confort para experimentar la expansión, la independencia, la creatividad y manifestación pura y magnífica de tu ser. ¿Qué ganás haciendo lo mismo que todas las personas? ¿Qué ganás quedándote encerrado, encerrada en el mismo lugar de siempre? ¿Qué ganás, incluso, escuchando los mismos discursos una y otra, y otra vez? Esta Luna nueva es la llave maestra que abre todas esas puertas que vos creías que son imposibles de abrir. Pero decime la verdad, ¿alguna vez intentaste abrirlas o sólo te quedaste con el “nunca voy a poder”?
¿Alguna vez te preguntaste qué pasaría si hoy fueras mejor que ayer y mañana mejor que hoy? Bueno, yo sí me lo pregunté y, de hecho, puedo decir que los resultados pueden cambiar tu percepción del todo. Aunque, desde ya te digo, esto no tiene nada que ver con empujarte hacia los límites o con estresarte para llevarte cada vez más lejos, porque suele confundirse. Si vos quisieras ser mejor ayer: ¿qué tendrías que hacer? ¿Qué cuestiones ves hoy que ayer no fueron saludables para vos? ¿Qué palabras, actitudes o gestos podrías reemplazar por algunos que sumen en lugar de restar? ¿Qué hábitos podrías incorporar para sentirte mejor?
Entender lo que hasta el momento no había entendido, sincerarte con vos mism@, asumir responsabilidades y hacer aquello que ya te toca hacer son sólo algunas de las cuestiones que se nos están presentando bajo la energía disponible de esta Luna llena en Sagitario. Tomar conciencia, creer en vos y saber que no hay una única verdad pueden ser algunas de las herramientas que te pueden ayudar a ir un paso más allá. ¿Estás list@ para iniciar este nuevo camino?
Vos bien sabés que hablar de las debilidades suele ubicarnos en una zona de incomodidad. Conversar sobre aquello que no hacemos tan bien, que nos cuesta o que hacemos sin darnos cuenta o siquiera sin intención, nos puede jugar muy en contra. Y sí… hablar de todas esas cositas que uno prefiere dejar abajo de la alfombra, no sienta muy bien! Mucho menos si hay alguien de por medio que nos está evaluando y anotando todo, TODO lo que sucede mientras esta conversación se da; como en el caso de una entrevista laboral, no?. Ehm. Sí. También. Algo que quizás lo volvería mucho más complejo. ¿Pero qué pasaría si en lugar de hablar de aquellas debilidades con vergüenza y timidez, con inseguridad y miedo, pudiera transformar todo eso en la confianza que me permite verme desde todas y cada una de mis perspectivas, con todo lo bueno y todo lo malo, para comprender que incluso aquellas debilidades son mis grandes fortalezas?
Nuestra casa. Ese espacio entre paredes, con muebles y adornos en su interior, con artefactos y utensilios. Ese lugar que pese a tener una medida específica, varía su tamaño según la perspectiva que utilices para verla. Se dice, que así como está nuestra casa, está nuestra mente. Así de la manera en que vivimos en nuestra casa, vivimos nuestro cuerpo. Esa forma en la que tratamos a nuestra casa, es cómo tratamos nuestras relaciones. Si llegás o estás en tu casa y ves a tu alrededor, ¿qué ves? ¿Qué sentís? ¿Qué olés? ¿Te gusta lo que ves? ¿Te sentís a gusto o hay algo que no te permite conectar con la comodidad que necesitás? ¿Hay orden o no? ¿Hay un rico aroma o preferías cambiarlo?
Hoy vengo con un tema que me tocó analizar a lo largo de esta semana y me pareció tan interesante como necesario tener en cuenta. Así que, si alguna vez te preguntaron cuáles son tus más grandes fortalezas y las más grandes debilidades y no supiste qué responder, este episodio te lo dedico con mucho amor. Si bien parece una tarea muy sencilla, sabemos que no lo es. Con frecuencia, esta pregunta es realizada por personal de recursos humanos a la hora de entrevistar a su futuro personal o en aquellas sesiones en las que se realizan los test vocacional. Sea de la manera que sea, en el momento en que se nos presente, sentarnos con nosotros mismos, con nosotras mismas y evaluar de manera consciente cuáles son aquellas habilidades y debilidades que hacen a nuestra esencia, no es nada fácil. Mucho menos si la respuesta va a ser considerada para un futuro puesto de trabajo, ¿no?
Cuando recién comenzaba mis prácticas de Yoga, hace muchos años, hubo una frase que se dijo en una de esas clases y aún resuena en mí: “Nuestra primera casa es nuestro cuerpo y, para el momento en que aprendemos a habitarlo, se convierte en nuestro hogar”. Cada lugar que habitamos, cada espacio en el que estamos, es nuestro hogar; desde el cuerpo hasta el mismísimo planeta. Las crisis existen en todos lados, desde cada ámbito en el que nos manejamos, hasta en cada ser que habita en este Universo. ¿Pero qué nos muestran realmente? ¿Por qué nos persiguen, incluso cuando todo parece ir bien? Si vos te fijás, a través de las grandes crisis nacen las grandes transformaciones y cambios. Y creo que esa es la finalidad de las mismas. Cuestionarnos, preguntarnos, indagar para conocernos cada vez más, buscar y conocer, vivir y sentir, todo en su conjunto abren puertas en nuestra vida. Cuanto más conocemos, más queremos conocer. Cuanto más crecemos, más queremos crecer. Porque de eso también se trata. De avanzar, evolucionar y dejar de repetir.
Esta vez, mientras titulaba este episodio, no pude evitar largar la carcajada. Hace unos días estaba hablando con una amiga, muy Géminis y salió el tema de Mercurio retrógrado, al que le puso los mil nombres mientras describía la situación en la que se encontraba. Tengo que decir que me reí demasiado en esa conversación, pero también me dejó pensando demasiado al respecto. Decime si no están apareciendo los encuentros casuales, abrir los ojos y darte cuenta de lo que hasta el momento no habías visto, o te llega esa información que te pone los pelos de punta porque ni lo imaginabas o te hace subir la bilirrubina jajaja. Madre mía, novedades si las hay, están apareciendo todas juntas y a vos te están cambiando la perspectiva de muchas cosas. De hecho, no me sorprendería que te estés animando a decir lo que guardabas, lo que sentías e incluso lo que querías hacer. Si es así, yo también brindo con vos jajaja. Mercurio parecerá retomado, pero es como dicen por ahí: bajo esas circunstancias, sólo se dirá la verdad… porque para pensar en la mentira, no hay chance. Así que, quien quería tapar las cosas, quien no se animaba a hablar, quien estaba excusándose para no hacer o no enfrentar… estén atentis porque la verdad está latente.
Tensión, nervios, cansancio, ansiedad, estrés, burnout, más cansancio, cuerpo hinchado, picos de energía y que ni vos te entendés. Aunque vos no lo creas, si estuviste así durante la última semana, este episodio es para vos. Creeme. No tiene desperdicio. El eclipse parcial de Sol en el signo de Tauro, abrió una ventana de 6 meses en el tiempo. Si bien el mismo sucedió el 30 de Abril (y yo te dejé otro episodio al respecto), ese eclipse está totalmente conectado al del día de hoy. Todo está cambiando y vos también. Así como lo demás pueden ver que toda tu vida se está moviendo desde Noviembre del 2021 (porque ahí fue el gran comienzo con enormes finales), este eclipse total de Luna Llena en Escorpio abarca el proceso emocional que vos estás viviendo a través de todos estos cambios.
Se dice que Mercurio era el mensajero de los dioses. Con alas en sus pies, Mercurio podía desplazarse de manera muy rápida de un lugar hacia el otro para lograr su cometido: comunicar. Astronómicamente hablando, Mercurio es considerado el planeta de más rápido movimiento dentro de nuestro sistema solar y, según la astrología, este movimiento está muy conectado a eventos, situaciones, manifestaciones y demás cuestiones que suceden en nuestro planeta. Si Mercurio rige la mente, la comunicación y todo lo que ya sabés, en su fase retrógrada realmente es un regalo. Cuando esto ocurre, es cierto que la mente busque reflexionar, que nos volvamos más introspectivos, analíticos y meticulosos… porque también es necesario ese momento en nuestras vidas. Realmente es necesario tener ese tiempo de reflexión para cuestionarnos y preguntarnos si estamos yendo en la dirección que queremos. Esta fase de retrogradación es la invitación perfecta para bajarnos de las alas mercuriales y analizar quiénes somos, quiénes queremos ser y si hay reformas que tenemos que hacer o decisiones que tenemos que tomar antes de continuar rápido y casi volando de un lado hacia otro.
Sabemos que dejar la zona cómoda cuesta. Cuesta mucho que de pronto tus papás te digan que ya no te pueden bancar, cuesta ver el resumen de cuenta antes de fin de mes y ver todos los recortes que tenés que hacer porque sino ni al arroz llegás, cuesta mucho más aprender a decir no… o, por el contrario, recibir ese no. Pero sabés qué es lo mejor de todo esto? ¿Acaso hay algo bueno en todo esto? Sí jajaja. Lo bueno es que estás creciendo y te estás dando cuenta del valor que tienen todas y cada una de las cosas que te rodean y que querés porque, a la larga, nadie viene gratis.
A veces, las personas llegan a nuestra vida de una manera muy particular y espectacular, como si alguien las enviara para enviarnos eso que necesitamos conocer, saber y tomar conciencia para comenzar a cuestionarnos algo, para ir un paso más allá. Son esos encuentros que parecen hasta estar predestinados y no quedaba más que conocer a esa persona para que algo nos despertara o nos moviera del lugar en el que estábamos.
Algunas personas vivien con miedos toda su vida, otras son consumidas por éstos, otras aprendemos a verlos, hacerles frente, aceptarlos y vivir más plenamente. Si bien en mi caso fueron los ataques de pánico aquello que me hizo temblar en cuerpo y ser, muchas personas enferman y es esa su manera de enfrentar sus miedos más profundos. Pero está claro que no a todas se nos manifiesta de la misma manera y ahí está nuestro gran punto de partida: “Por más que a simple vista parezcamos ser tod@s iguales, ni las gotas de agua son iguales entre sí”.
Acá la cuestión es QUÉ NO HACER EN TEMPORADA DE ECLIPSES. Ustedes saben que tanto para las Lunas llenas como para las fases de Luna nueva podemos hacer cartas de manifestación, liberación, limpiezas, vision boards o mapas de visualización para poder manifestar y lograr nuestros grandes deseos y anhelos. A su vez, podemos recurrir a depuraciones, detox, limpiezas profundas y demás cuestiones que se sientan como una purga o renovación. Lo cierto es que en temporada de eclipses, nada de esto es recomendable. Nada de rituales, ni cambios extremos (o deportes extremos) nada de intenciones o manifestaciones, nada de eso. ¿Entonces? Entonces en este podcast te dejo toda la info que necesitás saber :)
Cuando nuestro cuerpo enferma nos da señales para tomar conciencia y acción para cuidarlo y mejorarlo. Entonces, vamos al médico, nos hacemos chequeos, consultamos especialistas, tomamos medicamentos (si son requeridos), mejoramos la dieta e incluso nos activamos físicamente a través de los deportes o alguna actividad que nos dé ese movimiento que tanto estamos necesitando. Pero, aunque no lo creas, todo parte desde la atención. Se pone en manifiesto un síntoma, dolor o algo específico que nos enciende esa luz de alerta a través de la cual sólo nosotros, nosotras, decidimos si tomar acción o no, si mejorar o no. Algunas personas lo harán de manera inmediata, otras no tanto… la cuestión es que en algún momento, si no atendemos eso que se está activando a tiempo, algún día podría caer la gota que derramó el vaso. El cuerpo nos habla, nos alerta, nos avisa e incluso nos grita cuando algo no se siente bien, cuando algo no está funcionando… ¿Pero qué nos dice realmente?
Dicen que los eclipses nos acercan más a nuestros propósitos de vida, a la evolución de nuestra alma y ser. Son temporadas a través de las cuales vivimos tantos cambios a nivel personal, laboral, emocional, a nivel hogar o de relaciones que pareciera que toda nuestra vida está cambiando radicalmente. Pero más allá de los cambios que todos pueden notar, lo más interesante es poder observar eso que sólo nosotros podemos percibir, aquellos que nos hacen temblar tan desde la raíz que pareciera que toda nuestra esencia se está transformando y modificando. No es para temer, por el contrario, creo que es para agradecer. “Todo pasa por algo” y, por más que hoy no lo puedas entender, confiá porque lo que trae es mucho mejor de lo que hoy podés imaginar.
¿Cuáles son tus mayores miedos? ¿Qué es lo que te vienen a enseñar? ¿Qué es lo que quieren que veas para poder tomar conciencia y evolucionar?
Entendemos que las fases de Luna llena nos indican que un ciclo que inició hace seis meses está llegando a su final, pero desde esta perspectiva es importante comprender que para el momento en que hablamos de finales puede no significar que algo acaba y ya. Los finales abren puertas a nuevos comienzos. Los finales nos indican que algo pierde su forma mientras que puede adquirir otra para su evolución. Que vos ya no tengas tu cuerpo de bebé, no significa que ya no estás. Todo lo contrario. Ese cuerpo de bebé tuvo que transformarse para darle lugar al cuerpo que hoy tenés, tuvo que crecer y desarrollarse para adaptarse al medio en el que hoy vivís y de la manera en que vivís. Y así como lo hizo y continúa haciendo tu cuerpo, desde su lado más Ariano, también lo hacen tus relaciones y vínculos, tus trabajos y contratos, tus hábitos, rutinas e incluso tu vivienda. Todo va cambiando, todo se va transformando porque todo busca evolucionar.
A lo largo de nuestra vida, muchas veces se nos presentan varias opciones. Tal vez, tenemos que elegir si avanzar hacia lo desconocido o permanecer en este otro lugar que ya conocemos y, que debido a esto, nos genera cierta comodidad. Está claro que nos resulta mucho más fácil quedarnos antes que movernos para tener que aprender aquello que desconocemos, ver lo que ni imaginamos o enfrentarnos a lo que más miedo nos da. Pero, lo cierto en todo esto es que nada de que lo creamos e imaginemos en nuestra mente va a suceder realmente. Claro, porque aún no lo vivimos y no sabemos de qué se trata… por más que estemos horas y horas pensando al respecto.
Ver lo que no estabas viendo nos invita a percibir nuestra vida de una manera mucho más real, entendiendo que hoy jamás va a ser como ayer ni como mañana. Entendiendo que mirando el pasado sólo implica reproducir tan sólo una perspectiva, nuestra perspectiva de lo que vivimos; mientras que el mañana es el resultado de todo lo que suceda hoy, ahora. Por eso, tan sólo ver aquello que siempre estuvo ahí y vos no estabas viendo puede cambiar toda tu percepción, toda tu realidad.
Las situaciones de la vida, las reacciones, las palabras y respuestas que damos o nos dan también pueden tener su doble riesgo, por eso es que tenemos que pensar antes de hablar, tomarnos un momento antes de responder y evaluar muy bien una situación antes de mandarnos así como venimos. Muchas veces respondemos sin pensar o actuamos sin tener en cuenta a la otra persona y eso, a la larga, también puede tener consecuencias, sus riesgos; entonces nosotros también podemos terminar siendo como esa arma de doble filo”.
No hay libros que nos enseñen a vivir, ni a superar traumas, ni a reponernos de las situaciones más dolorosas o críticas de nuestra vida, porque no hay una vida igual a la otra; pero sí hay experiencias que nos ayudan a tomar diferentes perspectivas, a vernos como realmente somos y a darnos cuenta de que no hay nadie más que nosotros que nos pueda ayudar, por más intención que tenga o tiempo que nos dedique.
La ansiedad y el estrés generan en nosotros esos impulsos de querer escapar o ahogo cuando nuestro cuerpo físico recibe, a través del sistema nervioso, la señal de alerta. Esa señal que avisa que algo no está bien. Entonces, en este instante tan breve de tiempo, para el momento en que te das cuenta que hay gotas de sudor frío en tu cuerpo, o los temblores y mareos te toman por sorpresa, las glándulas adrenales están en su punto máximo produciendo adrenalina y cortisol mientras éstas se envían al torrente circulatorio. ¿Qué podemos hacer si esto nos pasa? ¿Qué podemos hacer cuando tenemos que seguir haciendo cosas que aún no podemos liberar? ¿Qué podemos hacer por nuestro cuerpo físico, mental y emocional para liberar las tensiones que surgen durante el día, para hacer espacio entre la presión que tantos nervios, ansiedad y, muchas veces, ese angustia que oprime nuestro pecho y nos acelera la respiración? ¿Qué podemos hacer en lugar de querer desaparecer o salir corriendo?
Si a vos te encanta saber tanto como a mí con respecto a las lunaciones, este episodio es para vos, porque a lo largo del mismo te voy a estar contando no sólo de qué se trata esta luna nueva en el signo de Aries, sino también de qué manera está conectada con la temporada de eclipses que está comenzado. Por lo tanto, yo que vos antes de continuar, voy a buscar algo rico para tomar, me hago de un lugarcito cómodo y continúo, porque esto se viene a puro fuego! Este 31 de Marzo, o 1ro de Abril (dependiendo del lugar en donde estés), se va a estar dando la Luna Nueva en el grado 12 de Aries. Así que, si vos conocés algo de astrología y tenés tu carta astral a mano, podés buscar este grado en el signo de Aries y ver en qué casa de tu rueda zodiacal cae, algo que te va a permitir tener un enfoque sobre los temas que vas a estar trabajando en los próximos seis meses. Pero si este no es tu caso, quedate porque a continuación te dejo unos tips e info que te pueden ser de mucha utilidad para comprender esta Luna nueva.
¿Qué pasa cuando un cubito de hielo se derrite? Cambia su forma. ¿Qué pasa cuando el agua se evapora? Cambia su estado. ¿Qué pasa cuando algo te enferma? Tu cuerpo te habla, se manifiesta y te avisa que algo no está bien. ¿Qué pasa cuando ya no hay manera de sostener lo insostenible o de guardar lo que ya huele mal? Está claro que hay que cambiar o al menos desechar eso que ya no va, ¿no? Aceptémoslo. Hay cosas que cambian y, una vez que lo hicieron, es muy poco probable que vuelvan a ser lo que era. Vos cambiaste mucho. Cambiaron tus gustos, tus formas, algunos gestos y respuestas. Quizás cambiaste de casa o de país, tal vez tenés otros vecinos o relaciones, tal vez tenés un nuevo trabajo o simplemente tu estilo de vida cambió. Puede, incluso, que no hayas cambiado nada de todo esto, pero hay algo en vos que te dice que ya no sos quien eras.
Querido apego, ¿cómo me desapego? ¿Cómo hago para soltar este trabajo que ya no va más? ¿Cómo hago para liberarme de esa situación que me genera tanta incomodidad y estrés? ¿Cómo, sencillamente, cambio este patrón de conducta que me tiene tan atado, tan atada? ¿Cómo hago para entender que esa relación ya no me permite seguir avanzando y ha cumplido su ciclo? ¿Cómo hacer para cambiar y no morir en el intento?
Hace seis meses tuvimos la Luna nueva en el signo de Virgo. El 18 de Marzo, ese ciclo llega a su final y, a través de este podcast, quiero dfejarte mi análisis al respecto. Uno que espero que te sea de ayuda para comprender el proceso que estuiviste viviendo y qué se estuvo manifestando hasta el día de hoy. ¿Qué estabas haciendo hace seis meses? ¿Qué sueños estabas teniendo y querías lograr? ¿Cuáles fueron las herramientas que empezaste a incorporar y aquellas habilidades por las que trabajaste para poder desarrollar aún más? ¿Qué fue lo que se activó en vos hace seis meses y hoy estás viendo los brotes de esa cosecha que estás a punto de recolectar? “Ver lo que no estás viendo” es ver quien sos hoy, quiénes te acompañan en este camino y de qué manera querés seguir viviendo tu vida. “Ver lo que no estás viendo” es entender que hay mucho más allá de lo material y tangible. Es sentir, conectar y percibir a través de eso que nadie vé pero todos sienten.