Conversaciones superficiales, comentarios incómodos, relaciones faltas de verdadero interés.
Interés genuino y honesto de saber, realmente, cómo estás. De eso, mucho y muchas veces.
Hoy te hablo de lo que nadie pregunta, pero quiere saber. Pero no se atreven y lo dejan ahí y no te cuidan, sino que te des-cuidan.
Preguntar a tiempo, interesarte en el alma de otra persona puede rescatarlo de un precipicio, de una depresión o de algún lugar que lo aleja de Dios. Seamos "hermanos en Cristo" verdaderamente. Por favor.
Porción de paz:
Salmos 32: 3
Mientras callaba, envejecían mis huesos
de tanto gemir todo el día.
Proverbios 3:27-28
No niegues un favor a quien lo necesita,
si está en tu mano el concederlo. Si ahora tienes, no digas a tu prójimo: “Vete y vuelve, mañana te daré”.